Altamente superdotados

Sujetos Altamente Superdotados

Desde el punto de vista psicométrico, los valores de los niveles de inteligencia en la población siguen una distribución que visualmente se puede representar como una curva en forma de campana (Campana de Gauss), de modo que los valores más comunes tienden a agruparse en el centro de la campana, mientras que los menos frecuentes se sitúan en los extremos. (Cuanto más “raro” sea el valor,

más alejado estará de la media.)

El Cociente Intelectual (CI) se conceptualiza como la dispersión en torno al valor promedio del grupo de edad al que un sujeto pertenece. Habitualmente se considera que la media de cada edad tiene el valor 100 y una desviación estándar de puntuación (SD) corresponde a 15 puntos.

Así pues, el CI es una puntuación estandarizada que informa de la posición relativa de un determinado sujeto respecto a su grupo de edad normativo, de forma que, por ejemplo, un sujeto que obtiene un CI de 115 nos está indicando que es más inteligente que el 84 por ciento de la población, ya que entre la media (50 por ciento) y una desviación estándar se sitúa el 34 por ciento de los sujetos, tal como se puede observar en la siguiente gráfica:

Lewis M. Terman, destacado psicólogo estadounidense interesado en el estudio de la superdotación intelectual, consideró superdotadas a aquellas personas que superasen en un mínimo de 2 desviaciones estándar el CI promedio, es decir, que tuvieran un índice superior a 130. Si nos fijamos en la gráfica comprobaremos que, idealmente, solo un 2.14% de la población superaría ese valor de 130 de cociente intelectual, lo que equivale a un percentil 98. (El sujeto es más inteligente que el 98% de los niños de su edad).

En este contexto, se puede hablar de niños ALTAMENTE DOTADOS a aquellos con un cociente intelectual de 146 o superior, lo que equivale a 3 o más desviaciones típicas por encima del promedio y un percentil de 99.9. (Es decir, que son más inteligentes que el 99.9 por ciento de los niños de su edad.)

La singularidad de estos niños los hace especialmente vulnerables y se requieren modificaciones en la conducta de padres, profesores y orientadores para poder colaborar en su óptimo desarrollo.

Características cognitivas:

Cociente intelectual muy alto.
Fuerte desarrollo asincrónico. (A más CI más disincronía)
Extrema rapidez en el procesamiento de la información. Estilo peculiar de aprendizaje. (Se saltan pasos en el proceso de aprendizaje, aparentemente no reflexionan antes de responder...)
Memoria extraordinaria, comprensión rápida de los conceptos, conocimientos amplios y precisos
Lenguaje hablado y aprendizaje lector muy precoz, elevado flujo verbal, lenguaje correcto y complejo.

Características no intelectivas:

Fracaso en el desarrollo de hábitos de trabajo en los contextos escolares (por eso; aburrimiento, distracción, aborrecimiento de la escuela...)
Dificultades para encontrar compañeros que le satisfagan. Riesgo de aislamiento social.
Saben que son rechazados por sus compañeros, a los que en cierto modo soportan mal porque existe un abismo entre su capacidad y la de los otros. Los altamente dotados se encuentran segregados académica y socialmente. Son bastante conscientes de su propia marginación.
Elevado desarrollo moral debido a su capacidad de comprensión y de reflexión, sin embargo su capacidad emocional es muy inferior y, en este sentido, es más vulnerable que otros niños. Puede vivir con intensidad inusitada hechos reales o ficticios y solamente el diálogo, la explicación y el apoyo del adulto parece poder ayudarle a vencer su disincronía. Pueden intelectualizar sus actos como mecanismo de defensa para asumir su complejo mundo emocional. ( de ahí su aire de ausentes, distantes, ajenos a la realidad...)

Si a estos niños no se detecta y educa preventivamente, quedarán marginados, intentarán encubrir su capacidad y sufrirán notablemente.

CÓMO EDUCARLOS

En la escuela no destacan necesariamente y pueden resultar minusvalorados. Aunque tienen altos recursos cognitivos, al ingresar en la escuela el rendimiento académico y la calidad de su adaptación personal y social dependen en gran medida del trato que reciban de los que tienen la responsabilidad de educarlos.

Combinar la aceleración del currículum con experiencias de enriquecimiento que les permita desarrollar su pensamiento creativo, y con el agrupamiento por capacidad o multicurso, de modo que mejore su autoconcepto y avancen en sus habilidades sociales, al interactuar con alumnos de similares recursos cognitivos. En clases con alumnos moderadamente dotados, a menudo desarrollan ciertas habilidades de liderazgo (mientras que en las clases regulares son alumnos aislados) Se les ha de dar la oportunidad de desarrollar ciertas destrezas de liderazgo y de relaciones sociales.
Necesidad de un programa individualizado, que combine el trabajo independiente en el centro y en su casa.
Educarlos para la diversión, el ocio, el tiempo libre, en juegos aptos para todas las edades.
Debido a su disincronía intelectual-afectiva, pueden necesitar apoyo psicológico. Padres y profesores deben dialogar con ellos y ser comprensivos y pacientes.
Tutoría entre iguales. En algunos periodos del horario escolar pueden ser monitores de algún alumno o pequeño grupos de alumnos. La tutoría entre iguales es un recurso de alto valor educativo en muchos casos. (no hay que abusar de esta opción)